A pocas horas de su regreso a Colón de Santa Fe, Luis Miguel Rodríguez, hace esperanzar a los hinchas "sabaleros".
Con respecto al presente de Colón, «Pulguita» fue muy sincero. «Me encontré con un equipo muy golpeado. Necesitábamos una victoria como la que tuvimos ante Almirante Brown. Colón es un equipo grande que necesita estar cerca de la clasificación. Hay que seguir por el camino de la victoria«, analizó.
El repertorio de temas del que Rodríguez habló fue tan amplio que incluyó empanadas, vino y los colores por los que simpatiza su mamá. En ese ítem se dio lo más curioso. «Mi mamá es hincha de San Martín de Tucumán. Le simpatizaba más que Atlético. También es seguidora de Alto Verde de Simoca», afirmó el delantero.
La declaración se produjo en el tramo de la entrevista en que recordó sus orígenes. «Viajaba de Simoca a San Miguel de Tucumán a entrenarme y a jugar. Uno no se siente ni más ni menos que nadie. Yo siempre me manejé de la misma manera, y eso hace que la gente me tenga tanto cariño. Sigo siendo el mismo chico que salió de Simoca, un poquito más grande, pero el mismo. Salgo a comprar al quiosco como un simoqueño más”, sostuvo Rodríguez.
¿Y sobre el «Decano»? «Siempre será la idea terminar en Atlético Tucumán, pero apareció Colón, donde era la opción para jugar de igual a igual y competir. Jugar me hace bien. Ahora estamos acá”, cerró el simoqueño.
Colón enfrentará en el estadio Padre Martearena, en Salta, a Central Norte. El partido corresponde a la fecha 23 de la Primera Nacional y comenzará a las 18, el domingo.
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