El Cuartel de Bomberos de Las Flores está compuesto por 25 personas y ocho de ellas son mujeres. Además, en la promoción de este año, egresarán dos más para sumarse al servicio.
Ellas cumplen una labor voluntaria que requiere constantes capacitaciones para desenvolverse eficazmente en situaciones difíciles, de emergencia y catástrofe.
Hoy las mujeres hacen lo mismo que los hombres, adentro y afuera del cuartel: apagan incendios, manejan camiones autobomba, operan escaleras y manipulan herramientas de corte. Algunas incluso llegan a ser jefas de cuerpos. Pero no se trata solamente de luchar contra el fuego: rescatan heridos en accidentes o incluso animales en peligro forman parte de su tarea.
“La vida siempre está en riesgo”, sostienen Romina Zocco y Maria Laura Salas. Cada vez que suena la sirena y se suben al camion y hasta que regresan al cuartel experimentan todo tipo de emociones. Preparadas para lo peor, enfocan su tarea en hacer el bien y salvar vidas.
Admiten que la vocación de servicio las atraviesa en todos los ordenes de la vida: social, familiar, de pareja, y hasta laboral. Trabajan a cambio de nada, no reciben sueldos y cumplen con una importante carga horaria, restando tiempo de ocio y descanso para ayudar a quienes sufren una emergencia.
Historias de entrega y sacrificio…bomberas voluntarias de Las Flores, vocación y servicio con alto grado de heroísmo.
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