En la última sesión del año, el Concejo Municipal de Santo Tomé aprobó por mayoría una ordenanza que prohíbe a los cuidacoches, limpiavidrios y otras actividades en la vía pública.
La normativa establece sanciones y multas basadas en el Código de Faltas y el Código de Convivencia de la provincia. La medida comenzará a aplicarse tras la promulgación del Ejecutivo.
Mity Reutemann, Presidenta del Concejo Municipal, explicó que el proyecto tiene su origen en 2018. En ese momento, ella y el actual Intendente Miguel Weiss Ackerley fueron los únicos que votaron a favor.
Reutemann destacó que la problemática de los cuidacoches involucra “muchas sensibilidades”. Señaló que es fundamental visibilizar las dificultades que enfrentan estas personas.
La edil aseguró que, al no haber estacionamiento medido en la ciudad, el rol de los cuidacoches carece de justificación. Además, denunció comportamientos violentos y la presencia de sustancias en estos trabajadores.
Reutemann aclaró que la ordenanza no busca descartar a las personas que se dedican a esta actividad. La propuesta incluye trabajar con cooperativas y programas de acción social para ofrecer alternativas.
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