En el Día Mundial del Donante de Sangre, en Santa Fe se llevaron a cabo actividades con el fin de concientizar a la población de la importancia que tiene ese hecho. "Estamos trabajando en la donación voluntaria, necesitamos que la gente se informe más y aumente el porcentaje de gente que está dispuesta a hacerlo", comentaron quienes organizaron esta campaña.
La sangre y los productos sanguíneos son elementos esenciales para el tratamiento apropiado de las mujeres con hemorragias asociadas al embarazo y al parto; los niños que padecen anemia grave a causa del paludismo y la malnutrición; los pacientes con trastornos hematológicos y de médula ósea, trastornos hereditarios de hemoglobina e inmunodeficiencia; las víctimas de un traumatismo, emergencias, desastres y accidentes, así como los pacientes que se someten a intervenciones médicas y quirúrgicas avanzadas.
En Santa Fe el porcentaje de donantes sigue siendo bajo ya que se estima que aproximadamente el diez por ciento de la población lo hace en forma voluntaria.
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