El abogado Fernando Burlando fue crítico con la estrategia utilizada por su colega Hugo Tomei, quien defiende a los rugbiers imputados, al sostener que es de un "alto grado de poca inteligencia" ya que las declaraciones de cinco de los ocho acusados son contradictorias a las imágenes que se mostraron en el juicio.
En días más que importantes y complicados, por el armado de los alegatos que se leerán 25 y 26 de enero, el abogado de la madre y padre de Fernando Baéz Sosa, también manifestó enojo por la actitud de Máximo Thomsen, el acusado más complicado de la causa.
"Thomsen dice que él fue a defender a un amigo que le pegaban, pero no le movieron ni un pelo. Mintió", remarcó Burlando. Además, el letrado sostuvo que en su testimonio el joven le pidió perdón a los papás de la víctima pero que nunca los pudo mirar a los ojos.
Al ser consultado sobre la forma en la que actuaron los rugbiers en el ataque y crimen de Fernando, el abogado insistió una vez más que todo se trató de un "acto de cobardía" y que fue una "emboscada que duró siete minutos".
Por último, con respecto a la decisión que pudiera llegar a tomar el Tribunal, Burlando señaló que hay muchas pruebas para que los acusados reciban prisión perpetua, todos por igual, pero hay que esperar a ver que interpretan los jueces.
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