La Justicia definió este martes la situación de Diego Concha, el extitular de Defensa Civil de la Provincia acusado de homicidio con motivo de abuso sexual contra la bombera Luana Ludueña. La víctima tenía 26 años cuando se suicidó en enero de 2022.
El ex funcionario tuvo la posibilidad de la última palabra antes que el tribunal pase a deliberar cuál será su futuro. Con la participación de un jurado popular, la Cámara Tercera del Crimen dictó el veredicto y sentenció a prisión perpetua a Concha.
En uso de su última palabra en el juicio, el exfuncionario rechazó pertenecer al "círculo rojo". Se definió como una persona "sencilla, humilde y trabajadora" y como un "bendecido" por llegar a un estamento del Estado.
"Que Jesucristo ilumine al jurado popular, que hayan podido ver cómo fue evolucionando, qué pasó en el transcurso de casi 60 días desde que estuve detenido en la vida de Luana", pidió entre varias referencias religiosas.
"He sido calumniado, conozco muy bien las perspectivas de género como padre y abuelo", siguió, y negó la versión de que "para entrar a trabajar a un equipo técnico para catástrofes la mayoría de las mujeres tenían que tener algún contacto o alguna relación sexual" con él.
Por su parte, el abogado querellante Carlos Nayi, en representación de los padres de Luana, planteó que el exjefe de Defensa Civil debe ser condenado a prisión perpetua. La fiscalía había pedido la condena de 20 años.
En tanto que los abogados defensores, Carlos Hairabedian y Sebastián Becerra, solicitaron la absolución asegurando que su cliente es inocente. No obstante, en caso de no ser considerado ese planteo, requirieron como medida subsidiaria que Concha sea condenado a ocho años de prisión por abuso sexual simple.
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