"Estuvimos cerca de mi tío porque lo queríamos y ahora estamos contagiados con Covid"

“Triste porque perdimos un familiar pero la estamos peleando y sobrellevando el momento”, comenzó relatando Pablo Salvioli con la voz quebrada.

Su familia está integrada por su mujer, embarazada de 12 semanas y Guillermina, de 4 años. Su esposa comenzó con los síntomas y espera el resultado del hisopado. “El bebé gracias a Dios hablamos con el ginecólogo y ella no contagia al bebé, genera anticuerpos. Mi hija no tiene ningún síntoma y mi suegra -que vive en la casa de al lado-, lamentablemente ya nos confirmaron que también es Covid-19 positivo”

Eduardo Oliva es su tío, estuvo internado un par de veces en el Sanatorio 7 de Marzo de Santo Tomé. “El lunes 17 lo vuelvo a internar con fiebre, pero pensamos que era una infección por lo que él tenía, nunca lo habían hisopado y cuando lo hisopan da positivo. Nos aislamos todos los que estuvimos con él y después me comentan que había pasado por la habitación de él una enfermera” con coronavirus.

“Nunca nos llamaron del Sanatorio, nunca nos avisaron”, por lo que fueron muchos los que fueron a visitarlo antes del día de su fallecimiento, el 22 de agosto y la mayoría de su familia está aislada y dieron positivo de Covid-19 . La decisión fue tomada por propia voluntad, porque el nosocomio nunca se hizo cargo de lo que había pasado.

Al día siguiente, Pablo se comunicó con el 0800 de la provincia y el miércoles le hicieron el hisopado que le dio positivo. “Mi mujer empezó con los síntomas el jueves y recién ayer la hisoparon”, con el agravante de su embarazo de 12 semanas.

Respecto a los síntomas, se puede decir que está atravesando por los más frecuentes. “Yo soy uno de los más afectados junto a mi suegra, porque mucho cansancio, mucho dolor de garganta, mucho moco, mucho dolor así, de tirarte a la cama -una gripe fuerte- y mucho mareo”, por lo que le indicaron Paracetamol y unas gotas para los mareos.  

En una casa con toda la familia aislada y el resto de los familiares en la misma situación, la rutina es muy particular. “Tratamos de levantarnos temprano, de seguir con el mismo ritmo vida trabajando por internet como de puede y los primeros días estuve aislado de mi mujer hasta que empezó con los síntomas. Después muchos llamados telefónicos, estamos muy mimados: mucha gente de Sauce Viejo que nos ayuda con el tema de la comida y los mandados”, a quienes agradecen por supuesto.

“Primero mucha gente se acercó a través del teléfono y me dijo “lo que necesiten” mis amigos, familiares, clientes, la verdad que lo agradezco”, reconociendo que esa fue la reacción de la mayoría cuando se enteraron.

Por último, Pablo ya habló con su esposa acerca de donar plasma una vez que superen el coronavirus. “Lo vamos a hacer junto a una prima que se llama Liliana”.

“Eviten las reuniones familiares por un tiempo, sé que nos gusta a todos pero hoy en día es el lugar del foco -nosotros estuvimos cerca de mi tío porque lo queríamos y ahora estamos contagiados-, cumplan el distanciamiento social, el barbijo y la higiene”.

“La distancia social es lo mejor”, concluyó.

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