Las bajas temperaturas que azotan a la ciudad de Santa Fe provocaron un aumento exponencial de las consultas e internaciones por síntomas respiratorios en los hospitales públicos. El brote de gripe, típico de los meses invernales, se adelantó este año y los efectores de salud se encuentran trabajando al límite de su capacidad.
Los hospitales Alassia e Iturraspe, principales centros de atención pediátrica de la ciudad, reciben más de 300 consultas diarias por enfermedades respiratorias. En el Alassia, la ocupación de camas supera el 90% y se trabaja a "cama caliente", lo que significa que se reutiliza el mismo espacio para diferentes pacientes. En el Iturraspe, la situación es similar, con una ocupación del 100% y la utilización de camas no pediátricas para atender a niños.
El virus sincicial respiratorio y la influenza son los patógenos que predominan en este momento. En el caso del Alassia, la mayoría de los pacientes internados son niños, mientras que en el Iturraspe la demanda se reparte entre pacientes pediátricos y adultos.
Las autoridades sanitarias advierten que el pico de contagios aún no ha llegado y se espera para mediados de junio. Por lo tanto, recomiendan a la población extremar las medidas de prevención, como el lavado frecuente de manos, el uso de barbijo en espacios cerrados y la vacunación contra la influenza.
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